jueves, 26 de mayo de 2016

Frieda Lawrence

La esposa de D. H. Lawrence, Frieda, vivió una verdadera aventura durante su unión con el autor y fue ampliamente conocida por personalidades de principios del siglo 20 (Alfred Weber, Max Weber, Otto Gross, Georgia O'Keeffe).

Frieda abandonó a su esposo e hijos para seguir a D. H. Lawrence. En medio de la Primera Guerra Mundial debieron luchar contra las sospechas de traición, la falta de trabajo y dinero y la incertidumbre de la guerra.

Más abajo un poquito sobre el Barón Rojo, el as de los aviadores alemanes.

 

Frieda Lawrence (1879 – 1956) fue una figura literaria alemana conocida principalmente por su matrimonio con el novelista británico D. H. Lawrence. Era pariente lejana de Manfred von Richthofen, el Barón Rojo.

Frieda nació en Metz. Su padre, el barón von Richthofen, fue ingeniero en la armada alemana y su madre fue Anna Marquier.

En 1899, se casó con el filólogo británico y profesor de lenguas modernas Ernest Weekley con el que tuvo tres hijos. Se establecieron en Nottingham, donde Ernest trabajó en la universidad. Durante su matrimonio con Weekley ella comenzó a traducir la literatura alemana, principalmente cuentos de hadas, al inglés.

Portrait of Frieda Lawrence, Taos, N.M.
Frieda in 1901

En 1912, conoció a D. H. Lawrence, ex alumno de su marido. Pronto se enamoró de él y la pareja se fugó a Alemania, Frieda dejando a sus hijos atrás. Durante su estancia, Lawrence fue detenido por espionaje y, después de la intervención del padre de Frieda, la pareja se dirigió al sur, por los Alpes, a Italia. Después de su divorcio de Weekley, Frieda y Lawrence se casaron en 1914. Tenían la intención de volver al continente, pero el estallido de la guerra los mantuvo en Inglaterra, donde tuvieron que soportar el acoso y la censura oficial. También lucharon con recursos limitados y la salud ya frágil de D. H. Lawrence.

Dejando la Inglaterra de posguerra en la primera oportunidad, viajaron ampliamente, finalmente instalándose en el Kiowa Ranch (ahora D. H. Lawrence Ranch) cerca de Taos, Nuevo México, y en los últimos años de Lawrence, en la Villa Mirenda, cerca de Scandicci en la Toscana. Después de la muerte de su marido en Vence, Francia en 1930, regresó a Taos a vivir con su tercer marido, Angelo Ravagli. El rancho es ahora propiedad de la Universidad de Nuevo México en Albuquerque.

Principalmente a través de su hermana mayor Else von Richthofen, Frieda conoció a muchos intelectuales y autores, entre ellos el socio economista Alfred Weber, el sociólogo Max Weber, el psicoanalista radical Otto Gross (que se convirtió en su amante), y la escritora Fanny zu Reventlow.

Por su aprobación la dramatización para el teatro de la obra de Lawrence Lady Chatterley´s Lover se convirtió en la única novela en ser puesta en escena. La obra de John Harte fue la única dramatización en ser aceptada por ella, y ella hizo todo lo posible para conseguir que se produjera. A pesar de que amó la obra cuando la leyó, los derechos de autor de la historia de Lawrence ya habían sido adquiridos por el Barón Philippe de Rothschild (miembro de la dinastía de los dueños de bancos: los Rothschild), que era un amigo cercano. Él no cedió los derechos hasta 1960. La obra de John Harte se produjo por primera vez en The Arts Theatre en 1961, cinco años después de su muerte.

Georgia O'Keeffe, que la conoció, dijo de ella:

Frieda era especial. Recuerdo la primera vez la vi, parada en la puerta, con sus cabellos despeinados, vistiendo un vestido barato de percal rojo que parecía que acababa de secar la freidora. No era delgada ni joven pero había algo radiante y hermoso acerca de ella.

Frieda murió a sus setenta y siete años en Taos.

Para saber

Manfred von Richthofen (1892 - 1918), también conocido como el Barón Rojo, fue un piloto de combate alemán en la Imperial German Army Air Service, durante la Primera Guerra Mundial. Es considerado el as de ases de la guerra, acreditándosele oficialmente 80 victorias en combates aéreos.

Manfred von Richthofen
Richthofen in his famous plane, 1917

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